Entrevista a Jaime Molina

1. ¿Quién es Jaime Molina?

Pues alguien a quien siempre le gustaron las historias y que siempre soñó con poder contar las que iban pasando por su cabeza. Un viejo conocido me definió una vez como un informático “letraherido”. Creo que lo decía con cierta ironía al pretender contraponer dos términos que pueden parecer contradictorios: un informático al que le gusta leer y escribir. El caso es que a mí me gustó esa definición.

2. ¿Cuándo comenzaste a escribir y qué fue lo que te motivó?

Empecé a escribir muy joven, con trece o catorce años. En mi familia sienpre ha habido una gran afición a la lectura y al cine. En casa de mis padres había muchos libros, y a todos nos encantaba el cine. Como en aquella época no era tan sencillo ver una determinada película si no la pasaban por la televisión o la proyectaban en algún cine, a mí me gustaba escuchar cómo mi padre o alguno de mis hermanos me contaban la historia de una película o de un libro, de principio a fin. Era la única forma en la que podían compartir conmigo esas historias que a ellos les habían gustado. Y si alguna de esas historias estaba accesible en la biblioteca de mi padre, la leía. Ese gusto por las historias, la lectura y el cine, me llevaron a querer escribir mis primeras historias cortas. Así fue como comencé a escribir.

3. ¿Cómo surgió la idea de escribir el libro ¿Y cómo surgió su título?

La idea surgió en una conversación con un amigo, que me contó que una conocida suya comenzó a tener experiencias adoptando el rol de sumisa. Ella le contaba cómo se iba adentrando, poco a poco, en ese mundo. Un día le contó que había conocido a un amo a través de Twitter y que concertó una cita con él para pasar un fin de semana completo en una casa de campo completamente aislada. A mi amigo no le hizo ninguna gracia aquella idea, pues no se fiaba de lo que pudiera pasar. Y aunque el fin de semana pasó y la chica volvió a su casa y llamó a mi amigo para decirle que todo había ido bien, yo me pregunté qué habría pasado si ella no hubiese vuelto, qué hubiera hecho mi amigo entonces. Y ese fue el germen de esta novela.

En cuanto al título, me vino de una forma bastante visual: Irene, una de las protagonistas de la novela, concierta una cita con un amo en una casa aislada a la que se llega a través de un camino sin señalizar. Tenía esa imagen mental muy presente: un camino de tierra, sin asfaltar, que apenas se percibe desde la carretera que lleva a él. Además, el título me parecía sugerente, porque sugiere algo intrigante e incluso peligroso. Mi pretensión es que al lector le hiciese hacerse preguntas como: ¿qué hay en ese camino?, o ¿adónde lleva? Y también, por último, creo que el título sugiere una metáfora del mundo oscuro del BDSM en el que se sumergen varios de los personajes de esta novela.

4. ¿Cómo fue el proceso de investigación para crear este libro? ¿En qué lugares te inspiraste para escribirlo?

A raíz de la historia que he mencionado antes, comencé a indagar en Internet, a leer información sobre relaciones de BDSM, cómo funcionan, el protocolo que siguen ambos roles (amos y sumisos), e incluso conseguí entrevistarme (a través de Internet) con personas que siguen este tipo de relaciones. Fue muy interesante. No me inspiré en ningún lugar concreto, aunque sí tuve presente cierto tipo de escenarios que usan los practicantes del BDSM, lo que ellos llaman las mazmorras, con una parafernalia que desde fuera resulta extraña pero al mismo tiempo produce una especie de fascinación morbosa.

5. ¿Cuánto tiempo has tardado en escribir tu libro?

Para escribir esta novela he seguido un proceso que no había hecho hasta ahora. Primeramente escribí un guion de largometraje con el que estuve trabajando, aproximadamente, unos seis meses. Cuando consideré que el guion estaba lo suficientemente depurado, lo adapté al formato de novela. Al partir del guion escrito previamente, me resultó más rápido el proceso de escritura de la novela, pues normalmente en una novela invierto de 9 a 15 meses (mi tiempo para escribir se reduce a una parte de la tarde, la noche y los fines de semana), y esta me llevó seis meses. Es decir, que contando el tiempo de escritura del guion, dediqué un año completo.

6. Si tuvieras que elegir un personaje del libro, ¿cuál sería?

Irene, sin lugar a dudas. Aunque la protagonista de la historia es Marta, la mujer policía que investiga el crimen del que parte la novela, creo que Irene es un personaje que encierra muchos secretos y que resulta intrigante y atractivo para el lector. A pesar de que el número de páginas en el que sale a Irene es inferior, creo que es ella quien marca de alguna forma el ritmo de la historia, quien seduce y engancha al lector porque es como la cara no visible de la luna, el personaje más interesante.

7. ¿Estás contento con la acogida que ha tenido tu novela?

El libro ha tenido críticas muy positivas, y eso siempre resulta satisfactorio. Además, está teniendo muy buena distribución, mejor que otros libros míos publicados anteriormente, supongo que se debe a que, al ser una novela negra, interesa a un público más amplio. Hay muchos lectores aficionados a este género y, por muchas novelas negras que se editen, es una franja de público que nunca falla.

8. ¿Tienes alguna manía a la hora de escribir?

Más que manías, cuando me involucro en la escritura de una historia lo que procuro tener es rutinas que me obliguen a escribir a diario. Escribir es una tarea que, en mi caso, está condicionada por mis obligaciones laborales. Trabajo por las mañanas, así que para escribir solo puedo aprovechar parte de las tardes, algo de las noches que le robo al sueño y los fines de semana. Cuando estoy con una novela procuro sentarme al ordenador y escribir todos los días, aunque solo sea una línea, pero eso me obliga a convivir con la historia a diario. No tengo manías que puedan considerarse peculiares, al menos no de las que yo sea consciente.

9. ¿Qué es lo que te inspira a escribir?

Más que inspiración, yo lo llamaría necesidad. No creo en la inspiración en el sentido que se suele entender, esto es, que las ideas te vienen como por arte de magia y un día tienes una novela entera en la cabeza como por arte de magia. Es posible que haya una idea, una chispa que prenda y de origen a una historia. Pero para que esa historia se desarrolle y concluya, no queda otra que trabajar en esa idea, darle vueltas, desechar y volver a repensarlo todo, escribir y reescribir. Es la única manera de terminar una obra literaria, ya sea un relato, una novela, un guion, o una poesía.

10. ¿Dónde podemos encontrar tu libro?

Pues lo han distribuido en muchas librerías de toda España y también puede encontrarse en portales como Casa del Libro o Amazon. Es fácil conseguir un ejemplar, creo yo.

11. ¿Tienes algún nuevo proyecto?

Siempre guardo algún proyecto en la recámara, sí y ahora tengo dos en mente. Ambos son proyectos para un guion de cine y puede que cuando los concluya haga lo que hice con Camino sin señalizar: convertir el guion en una novela.

12. Para terminar, qué les dirías a los lectores y lectoras que están leyendo esta entrevista.

Me gustaría animarlos a leer este libro, claro. Y espero que, si lo hacen, disfruten de la novela y pueda seguir ofreciéndoles en el futuro otras obras que les puedan resultar igualmente interesantes. Pero en caso de que no les atraiga la trama de Camino sin señalizar, lo invitará en cualquier caso a leer. Por suerte hay infinidad de libros estupendos, para todos los gustos y colores, y leer nos hace ser mejores, creo yo. Así que, les diría que no pierdan el tiempo y que lean mucho.